Publico artículos sobre cuestiones filosóficas y también sobre temas de interés general. Soy profesor de Filosofía, escritor y filósofo. Invito a los que lo deseen a visitar mi canal de Youtube: https://www.youtube.com/channel/UCcUgQXHBUIwjdluJYOHEpEA Libros de los que soy autor: Ensayos filosóficos, Esencia y transcendentalidad en el realismo de Zubiri, Diversa realidad y Perspectivas en Amazon y José Gaos y la filosofía coetánea, etcétera.
sábado, 31 de marzo de 2018
viernes, 30 de marzo de 2018
jueves, 29 de marzo de 2018
miércoles, 28 de marzo de 2018
LIBROS DIGITALES
Son el presente y el futuro. La facilidad para publicar libros digitales
o electrónicos en diversas plataformas
de autopublicación es algo a considerar muy positivamente.
Amazon, Bubok y Lulu.com son las plataformas de publicación y venta de libros más interesantes, a mi
juicio, aunque existen muchas más que están disponibles para los autores o escritores.
Frente a un proceso largo y lleno de condiciones y requisitos de las
editoriales tradicionales en papel están estos sistemas de publicación digital
que son fáciles de usar por los que escriben.
Ya que todo escritor o persona que escribe tiene pleno derecho a publicar
lo que escribe para los lectores del presente y del porvenir. También es una
forma de dar visibilidad a los que se
compone y plasma por escrito. El soporte digital en el caso de los libros y
también en el de los artículos es muy útil y aporta mucho dinamismo, ya que se
difunde lo creado a través de Internet y las redes sociales. Y lo que se
publica en el formato digital permanece para siempre. Con la ventaja añadida de
que el libro digital se puede imprimir bajo demanda también por los lectores
además de poder leerlo en una tableta,
ordenador o móvil.
La inmediatez de la autopublicación es muy importante, porque permite ver
el resultado de modo muy rápido y sin esperas de meses o años. El tiempo es un
elemento crucial en la actual sociedad digital en todos los sentidos. Además,
los libros electrónicos o digitales se pueden reeditar en papel también. En
cualquier caso, lo que es evidente es
que el acceso a contenidos culturales
cada vez es más frecuente a través de soportes de lectura electrónicos que cada
vez son más populares y conviene tenerlo en cuenta.
De hecho, la abundancia cada vez mayor de libros clásicos de filosofía,
literatura, etcétera, en PDF en abierto u online es una muestra más del avance
imparable de la edición digital de libros y artículos. Esto no significa que
vayan a desaparecer los libros vegetales
o en papel, ya que seguirán existiendo por numerosas razones. Lo decisivo es la
calidad de lo que se publica independientemente de si es en formato digital o
vegetal.
La libre creatividad se ve muy potenciada por la edición y publicación
digital, porque los escritores se pueden concentrar especialmente en escribir. Puesto que los eBooks
o libros digitales se pueden crear con rapidez para que estén disponibles y visibles para el público de lectores de
todo el mundo. La visibilidad que ofrece la publicación digital es continua las
24 horas del día y los 365 días del año y se extiende telemáticamente por todo
el planeta. Aunque suene pretencioso y exagerado es evidente y es la realidad.
Ya se puede escribir y publicar libremente y de forma inmediata todo lo
que se quiera. Y si parece que la cultura escrita está en decadencia frente al
predominio de lo visual, también es cierto que seguirá existiendo y siendo
decisiva por muchas razones y causas.
El problema de la piratería en el mundo digital afecta a una parte de lo
que se publica, ya que las leyes y normas no evitan que se produzca, aunque
contribuyen a que sean sancionados los
que cometen actos de piratería.
Los autores de libros y artículos tienen derecho a cobrar una comisión
por su propiedad intelectual. Ya que escribir es una tarea muy gratificante
pero que lleva tiempo y hay que pagarlo. Las horas de escritura no son a
beneficio de inventario deberían ser compensadas monetariamente si lo que se
escribe se publica. Con parte de los beneficios económicos de la publicidad que
acompaña a los artículos se debería pagar a todos los articulistas. Sería lo
racional y justo. También es cierto que existe el procedimiento de colaboración
para escribir, una alternativa que hace real y efectiva la difusión de lo que
se escribe a numerosos lectores en todo el globo.
Por otra parte, todos los usuarios de Internet tienen que acostumbrarse
a que no todo es gratis en la red. De
todas formas, los que escriben lo seguirán haciendo, porque es una actividad
apasionante y supone un gran disfrute y goce creativo.
martes, 27 de marzo de 2018
lunes, 26 de marzo de 2018
ESCUELA DE FRANKFURT
Son un grupo de investigadores que
consideran las teorías de Hegel, Marx y Freud y que también son representantes
de la denominada teoría crítica. Analizan las condiciones sociales e históricas
de la realidad y plantean la necesidad de un cambio transformador. El libro de
Max Horkheimer del año 1937 titulado Teoría tradicional y teoría crítica es la
que sirve de texto fundacional de la teoría crítica.
No fue una escuela lineal y única. Era una teoría social y política de
izquierdas, pero que no se aliniaba con la ortodoxia marxista de la URSS. Se
buscaba una renovación crítica del marxismo. Habermas pertenece a la segunda generación
de la Escuela de Frankfurt.
Es, sin duda alguna, uno de los
centros de investigación y de irradiación del pensamiento más influyentes del siglo veinte. Ha hecho de la
filosofía política y de la razón sus temas fundamentales de reflexión.
Desarrolló la crítica de la razón.
Marcuse 1898-1979 fue discípulo de Adorno y logró la celebridad por el
movimiento estudiantil de 1968, que lo proclamó su guía, desarrollando las
consecuencias de la dialéctica negativa para la crítica de la sociedad
industrial avanzada.
Con Habermas nacido en 1929, último heredero de la Escuela de Frankfurt,
ayudante primero de Adorno y luego de Gadamer, la dialéctica negativa se mezcla
con la hermenéutica deudora de Nietzsche y Heidegger, para cumplir el destino
trágico de la razón y dar origen a la
teoría de la acción comunicativa y a una
versión procedimentalista del derecho basada en una interpretación kantiana de
la filosofía de Hegel que Habermas reconoce le provoca miedo y le parece inalcanzable.
Los miembros de la Escuela de Frankfurt proceden del ámbito de la
filosofía. Sus planteamientos críticos son elaborados desde una perspectiva
social y política en contra de la injusticia y la irracionalidad existente en
la sociedad del siglo XX. Pero sus análisis se pueden aplicar también al siglo
XXI y estoy seguro de que con más intensidad y razón.
El Big Data y el control de los datos de todos los internautas es una
realidad ya y es algo que da que pensar, porque, por ejemplo, en China el
gobierno utiliza un procedimiento o una aplicación electrónica en Internet para
controlar las navegaciones de los chinos y dar el visado o no en función de los
datos acumulados y registrados. Es algo claramente injusto y que invade la
privacidad.
La Teoría crítica propuesta por la Escuela de Frankfurt se fundamenta
en la negatividad, ya que no es posible
una total conceptualización de la realidad. Algo que es afirmado por Adorno.
Según estos pensadores no se puede construir una utopía positiva. Lo que es
factible es decir lo que no queremos para el futuro o, lo que es lo mismo, se
puede describir una utopía negativa.
La Teoría crítica considera que la realidad social contemporánea es irracional, injusta y opresora en gran
medida. De lo que se trata es de logar una sociedad más racional y humana.
En este sentido, es evidente que los planteamientos de Habermas que ataca
el neopositivismo y el decisionismo de Albert discípulo de Popper se centra en
el deseo de hacer ver que es posible una racionalidad de los fines y también
que debe afirmarse el carácter normativo
de la ciencia social.
Lo que reafirma la necesidad de una racionalidad científica y social mucho
más amplia que la establecida por el positivismo. En realidad, el problema
fundamental es tener clara la forma de racionalizar la sociedad para que sea
más justa y solidaria. Habermas con su teoría de la acción comunicativa quiere
dar razón, según sus propias palabras, de los fundamentos normativos de una teoría crítica de la sociedad y lo
consigue. Otra cuestión es llevarlos a la práctica y a la sociedad. Lo que no significa que no
sea algo posible y factible en el ámbito político y social.
domingo, 25 de marzo de 2018
sábado, 24 de marzo de 2018
miércoles, 21 de marzo de 2018
VÍDEOS
Lo mejor, a mi juicio,
de la creación y publicación de videos es que permanecen para siempre y nos dan
a conocer en el presente y en el futuro. Incluso cuando ya no estemos
físicamente estaremos presentes virtualmente a través de las grabaciones audiovisuales.
El fármaco de la memoria que es la escritura, según Platón, es algo aplicable a
lo que sucede con los videos y audios publicados.
Somos seres históricos
y lo que se produce y publica forma parte de lo que aparece en los sistemas de
comunicación y en Internet. Y se tiene acceso a esos contenidos de forma
universal y cada vez contando con un mayor número de internautas. A medida que
grandes zonas de África, Asia y otros
continentes se convierten en nuevos usuarios
de los medios digitales globales la creación cultural se expande y
extiende cada vez más.
Es la nueva realidad
de la sociedad telemática o digital en la que ya estamos plenamente inmersos.
La expresión escrita de las ideas es
esencial en la cultura actual. La producción filosófica y literaria tiene su
cauce de publicación natural en los
soportes vegetales tradicionales y
también en los formatos digitales.
Las publicaciones
electrónicas son cada vez más numerosas, tanto en el ámbito académico o
formativo como en el del entretenimiento y también en el informativo. Los
semanarios, revistas y diarios digitales cumplen funciones muy importantes de
transmisión de información y contenidos culturales.
La utilización de
videos tutoriales o explicativos es cada vez más frecuente en todos los ámbitos de la vida y también en el
campo de la creación cultural. Y es algo muy positivo. Lo escrito convive
perfectamente con lo audiovisual ya que son estilos expositivos y artísticos
complementarios.
El arte de elaborar
videos está cada vez más de moda. Crear o producir imágenes en movimiento es algo cada vez más frecuente. Vivimos en
una cultura audiovisual. Retenemos un treinta por ciento de lo que vemos y un
veinte por ciento de lo que oímos, aproximadamente.
Actualmente parece que
impactan más los contenidos difundidos en video que los escritos. Hablando de
forma general, ya que puede haber excepciones.
La integración de los
escritos con lo visual es el presente y el futuro. Un artículo escrito
acompañado con un video hace que sea más leído y que la gente se fije con mayor
intensidad en su contenido, porque atrae más la atención de las personas.
En lo relativo a la
calidad de la producción audiovisual
conviene indicar o es pertinente decir que la cantidad de lo producido
es importante, pero no debe ser el único criterio. Generalmente se considera
que es más esencial la calidad que la cantidad. Y no estoy en desacuerdo.
La perfección es algo deseable
y positivo y debe orientar los impulsos creativos, aunque no debe limitar la
actividad de creación. No todo lo que se crea tiene que ser necesariamente
genial o tal vez sí. En cualquier caso,
lo fundamental es crear, hacer y publicar. Lo restante es secundario.
En este sentido las
posibilidades que ofrece el mundo digital en el que existimos son inmensas. La
Constitución española y los Derechos
Humanos reconocen que los ciudadanos pueden expresar libremente contenidos a
través de cualquier medio de difusión. Y los materiales pueden gustar o no, pero
mientras se respete el ordenamiento legal vigente no hay límites a lo que se
puede publicar o difundir por medio de videos, audios, escritos, etcétera.
Conviene no olvidarlo.
Los videos en la
enseñanza cada vez son más importantes, porque los alumnos son nativos
digitales y entienden mejor los
contenidos con el apoyo de los medios audiovisuales. Tampoco quiero decir que
sea absolutamente imprescindible usar videos en los procesos formativos, pero
es muy aconsejable, ya que puede aumentar el nivel de comprensión de lo que se
explica o muestra.
lunes, 19 de marzo de 2018
LA SOCIEDAD IDEAL DE ALFARABI
Este gran pensador islámico murió en el año 950 y es conocido por el
sobrenombre de «el Segundo Maestro», ya que después de Aristóteles aportó con
sus obras médicas, filosóficas y
matemáticas un caudal de conocimientos y comentarios extraordinariamente
valiosos. Ciertamente, en su libro La
Ciudad Ideal este sabio musulmán ya reflexiona acerca del modelo de sociedad
que, a su juicio, debe fundamentarse en la ciencia política y en la
inteligencia práctica. Parte de un reconocimiento de que es legítima la
pretensión de realizar plenamente la perfección humana en la realidad social.
Los principios racionales son
para Alfarabi los que deben regir las decisiones de los gobernantes,
precisamente, para que sea posible la felicidad común de los ciudadanos.
Reitera la necesidad de una rigurosa solidaridad social, porque todos los
individuos logran su concreta realización personal, si toda la sociedad goza. Escribe Alfarabi: «La
sociedad en que todos se ayudan para obtener la felicidad es la Sociedad
Modelo». Critica este filósofo varios tipos de sociedades reales imperfectas
que él clasificó acertadamente de acuerdo con las categorías filosóficas del
siglo X.
El primer tipo se puede denominar
sociedad tecnocrática usando el lenguaje actual, o régimen social de la pura
necesidad. En esta clase de sociedad parece que lo esencial es la adquisición
de la mayor cantidad de bienes materiales, pero sin una redistribución
igualitaria. Si bien este estado social puede degenerar, y convertirse según
Alfarabi en la sociedad de la riqueza o de la opulencia en la que los medios
utilizados para atesorar bienes dejan de importar. Aunque la degradación social
y política puede alcanzar mayores niveles, en un desarrollo negativo del orden
comunitario. De este modo, se llega a la sociedad innnoble o depravada que es
equivalente al consumismo y hedonismo
actual.
Las preferencias de Alfarabi son,
claramente, las de la existencia de una sociedad del honor, porque para él es indudable, lógicamente, que el poder
tiránico es el mayor de los males para la sociedad. También plantea el riesgo
del surgimiento de una sociedad demagógica que se fundamenta en el gobierno de
la masa, pero perjudicando los intereses de los ciudadanos, porque se basa en
la satisfacción de los caprichos de cada uno, sin contemplar y respetar los
derechos de todos.
El interés de este pensador es,
precisamente, establecer lo deseable de un modelo de estado social ideal aunque
pueda ser calificado de utópico. Alfarabi escribe que: «El Estado Modelo se
opone desde luego al Estado ignorante, al Estado corrompido o inmoral, al
Estado versátil o alterado, al Estado extraviado». En todo caso, el
procedimiento mejor para reconducir la
situación social y ciudadana es la perseverancia en las buenas conductas, algo
que se deriva directamente de lo escrito por Alfarabi, y que es extrapolable a la sociedad actual.
Aunque no conviene olvidar que la influencia del neoplatonismo y el misticismo oriental están
presentes en este sabio, puesto que afirma, entre otras cosas, que el hombre se
esfuerza por asemejarse a Dios.
Considero que el bienestar
general es algo lograble, pero depende de la eliminación de las prácticas
políticas corruptas, y de la elaboración de sistemas normativos que impidan de
un modo efectivo que la corrupción económica y política siga existiendo.
También se echan de menos, en mi
opinión, discusiones pormenorizadas de expertos en cuestiones económicas de
distintas tendencias, ya que la diversidad y el pluralismo de ideas puede clarificar
muchos aspectos que son matizables y debatibles.
Además, los dirigentes políticos
deben huir de la ignorancia y no deben conformarse con una política de mínimos
sino con una de máximos. Porque arriesgar con medidas económicas más
innovadoras y radicales dentro de unos límites, no es algo contradictorio ni
opuesto al sentido común.
miércoles, 14 de marzo de 2018
HOBBES
Es un filósofo británico que nació en 1588 y falleció en 1679. Hobbes era
sensualista o materialista, ya que no admitía más conocimiento que el sensible.
Tampoco aceptaba más criterio que la sensibilidad en su explicación de la
teoría del conocimiento.
Era nominalista de acuerdo con lo pensado, de forma general y lógica, por
los pensadores materialistas. Porque para la filosofía no hay más realidad que
la finita, contingente y sensible. En este sentido se aleja claramente del
racionalismo cartesiano y leibniziano y de cualquier otro tipo de
espiritualismo o idealismo. Su pensamiento es parecido al característico del
empirismo. La observación es esencial en el conocer y la experiencia también.
El hombre, lejos de ser naturalmente sociable, es esencialmente
individualista y egoísta, sin más
cuidado que su propio bien o placer. El derecho y lo útil son una y la misma
cosa. En este sentido, su planteamiento ético puede ser considerado
utilitarista.
El materialismo con su corolario natural que es el nominalismo en
Filosofía y Psicología es lo que Hobbes afirma con sus obras. Establece una
especie de sensualismo utilitarista en moral. Desde la perspectiva política
está inmerso en un despotismo que se basa en la fuerza del poder y de las
leyes. Su obra más conocida, Leviatán de 1651, que es una teoría acerca del
Estado, era una defensa del absolutismo.
La acusación de ateísmo le supuso el enfrentamiento con algunos obispos
ingleses. En la filosofía de Hobbes, el mecanicismo se extiende también al ser
humano y a su organización en la sociedad. Todo lo que existe es materia y
movimiento. Lo que supone la afirmación de una claro mecanicismo.
El fenomenismo afirmado por Hobbes establece que el efecto de de los
cuerpos exteriores sobre el sistema nervioso produce sensaciones y
pensamientos. La libertad es la falta de obstáculos para llevar a término una
conducta.
Es la razón o la ley natural y no el orden divino la que dicta las normas
de un pacto que da origen al Estado y a la sociedad. Hobbes enumera diecinueve
leyes naturales y define el pacto de la siguiente forma: “El pacto es el contrato por el que los hombres dejan
atrás el estado de naturaleza”.
Frente a la guerra de todos contra todos existe la necesidad de un poder
coercitivo y unas leyes que garanticen la seguridad de todos. El Estado para
Hobbes concentra el poder supremo. Se expresa y materializa en un monarca o
soberano absoluto al que llama el
Leviatán. El cálculo racional es lo que propicia un pacto que da lugar al
Estado.
Ya que el hombre es un lobo para el hombre, lo mejor es controlar el
egoísmo humano para que no perjudique a nadie. El soberano fuerte también es
necesario para Hugo Grocio el fundador del iusnaturalismo moderno, ya que
garantiza el orden y la paz.
Para Hobbes el fundamento de la moral está en la ley y en la autoridad
civil. Desde la perspectiva política considerando que vivió y pensó en la época
del absolutismo es entendible que defendiera y afirmara un poder fuerte para
preservar el orden y el buen gobierno del Estado. Su gran valoración de las
leyes es también algo muy positivo. Aunque no llegó tan lejos como Locke en su
defensa de los derechos naturales y del liberalismo.
También es cierto que el empirismo de Locke surgió después de la muerte
de Hobbes de un modo sistemático con el Ensayo sobre el entendimiento humano de
1690.
Gozó de una buena reputación y en 1645 fue elegido con Descartes,
Roberval y otros para arbitrar en una controversia sobre el problema de la
cuadratura del círculo. Hobbes murió a los 91 años y se dice que sus últimas
palabras antes de perder la consciencia fueron: “Un gran salto en la
oscuridad”. Su producción filosófica es muy valiosa, por sus argumentaciones
teóricas y su capacidad crítica y analítica. Se interesó
por varios campos de conocimiento y poseía una gran y variada formación.
domingo, 11 de marzo de 2018
SIN MIEDO
En la vida lo mejor es
no tener miedo a nada, aunque se sea prudente. Porque la existencia es breve,
aunque no lo parezca. Y nadie sabe lo que va a durar su trayecto vital en este
mundo. Por tanto, la actitud optimista y serena es la más apropiada.
El coraje o la
valentía es, indudablemente, una gran virtud humana que impulsa a seguir
adelante a pesar de impedimentos y contratiempos. Actuar correctamente y
realizar la vida que cada uno quiere es la expresión del coraje moral, aunque
suponga enfrentarse o luchar contra el descrédito, los prejuicios, la
incomprensión, la maldad, el deshonor y las represalias sociales o la
marginación. La buena conducta y la verdad triunfan siempre a la larga.
No cabe duda de que el
miedo es un mecanismo de defensa y protección que está presente en la mente
humana desde el principio de la evolución. Para no morir arrepentido es mejor
vivir sin miedo.
En multitud de libros
e investigaciones sobre situaciones de enfermos terminales y moribundos se pone
de manifiesto que bastantes personas a punto de morir se lamentaban de haberse
rendido al miedo y no haber cumplido muchas ilusiones.
En realidad, en la
vida nunca pasa nada, ya que lo máximo que nos puede suceder es que morimos, lo
restante no es para quitar el sueño. La existencia da innumerables vueltas y
eso es lo que da un claro y profundo optimismo al transcurrir del camino vital.
Como escribió el
historiador romano Tito Livio: “El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas
peor de lo que son”. Y me atrevo a decir también que peor de lo que serán. El
futuro no está escrito y puede ser muy diferente a como lo imaginamos en muchos
aspectos.
Es perfectamente
entendible que Séneca en De la brevedad de la vida escriba que “la verdadera
felicidad es disfrutar del presente”. Ya que especular con lo que puede suceder
en el futuro puede causar temor e inquietud innecesarios y contraproducentes.
También dice Séneca que “ninguno pone los ojos en la muerte; todos alargan las
esperanzas, y algunos disponen también lo que es para después de la vida…,”.
Desde las escuelas
filosóficas helenísticas se insiste en el valor de la serenidad o tranquilidad
de la mente para afrontar la vida. Tranquilizarnos con las enseñanzas de
Epicuro o de los pensadores estoicos es algo muy útil y recomendable y también
disputar con Sócrates y otros numerosos filósofos. El mismo Séneca escribe que
debemos entregarnos de todo corazón a aquellas cosas que son inmensas y eternas
y que nos comunican con los mejores. En
efecto, la filosofía, la literatura, el arte o la cultura son lo más excelente
en la vida y nos hacen vivir más intensamente. La propia actividad creativa es
una fuente de goce inmenso.
Una actitud asertiva,
optimista, alegre y apasionada es la mejor combinación para evitar los temores
y miedos. Nada grande se ha hecho sin pasión en nuestro mundo. Y esto es algo
que conviene tener muy presente. La existencia está compuesta o entretejida de
emociones y sentimientos fundamentalmente, con la dirección de la razón, en
cierto sentido.
En la sociedad actual muchas personas se preocupan demasiado
por todo. Están en su derecho, si así lo
quieren, ya que la libertad de conducta y de pensamientos es algo bueno por sí
mismo, ya que nos hace verdaderamente humanos, pero no es una buena actitud
psicológica preocuparse, ya que reduce
la calidad de vida de la persona.
Lo principal, a mi
juicio, es ser conscientes de que los miles de días que tenemos a nuestra
disposición no son algo interminable y es bueno aprovecharlos al máximo. Y
esforzarse en ello no supone vivir amargados, todo lo contrario.
La pasión y la ilusión
deben ser los principios rectores de los comportamientos ya que son los que
potencian la fuerza y la energía de la actividad creativa de los seres humanos.
Somos capaces de grandes cosas, pero los requisitos básicos son la constancia,
perseverancia y tenacidad. Y todo esto siendo apasionados en todo lo que
hacemos. De esta forma se pueden lograr grandes resultados. La eternidad nos
espera, ya que la vida es efímera, pero puede ser grande. Y depende de
nosotros.
jueves, 8 de marzo de 2018
MUJERES TRABAJADORAS
La brecha salarial
entre hombres y mujeres es algo intolerable. No es de extrañar que las mujeres
digan basta ya. Lo pueden decir con toda razón en múltiples aspectos de su
vida. La realidad en la que estamos es todavía muy desigual en el campo
laboral, en muchos trabajos y en numerosas situaciones.
Los gobiernos y las
autoridades, a mi juicio, tienen que aplicar el derecho laboral ya existente y
en vigor con más contundencia y efectividad.
Las empresas que no cumplan con las condiciones establecidas por la
legislación en relación con la igualdad salarial deben ser sancionadas
fuertemente. Ya que, si se aplican simples multas que no son elevadas se
seguirán, probablemente, incumpliendo las obligaciones o normas de cara a las
mujeres trabajadoras en relación con el mayor salario cobrado por los hombres.
La desigualdad
existente a nivel de trato y tipo de vida entre hombres y mujeres es todavía
muy considerable en muchos casos, aunque no en todos. La lucha feminista está
dando resultados, pero el avance es lento,
en mi opinión. Porque existen inercias que es difícil cambiar, de forma rápida,
en la sociedad actual.
Las nuevas
generaciones que son educadas de un modo diferente son la esperanza para que
haya una igualdad real en todos los sentidos entre hombres y mujeres. Puesto
que todos somos personas con iguales derechos.
Aunque las mujeres
pueden ser madres esto no supone que tengan que soportar ningún tipo de
discriminación laboral o de otra clase. Al contrario, deben ser más protegidas
y apoyadas. En algunos ámbitos de actividad como la Sanidad la mayoría de los
trabajadores son mujeres. Y en Educación ocurre algo similar.
La huelga del 8 de
marzo ha sido un éxito rotundo, porque se han oído las voces de millones de
personas en toda España y en Europa que exigen la igualdad ya. Parece que más
de cinco millones de personas han secundado los paros o la huelga en nuestro
país. Es un dato muy relevante y cargado de significado. El feminismo tiene
razón en lo que reclama. La violencia machista tiene que ser erradicada y
suprimida. El trato vejatorio es algo insufrible e intolerable.
El trabajo de las
mujeres suele ser doble respecto al que realizan muchos hombres. Conviene reconocerlo.
Y esto está cambiando, afortunadamente. Las tareas del hogar deben ser compartidas.
Los roles deben ser diferentes, pero fundamentados en la igualdad. No vería mal
que hubiera un sueldo o salario por la realización de las tareas de la casa. De
este modo se compensaría a muchas mujeres que no pueden compatibilizar el
trabajo fuera de su casa con el cuidado de sus padres o familiares mayores y de
sus hijos.
La labor que realizan
numerosas mujeres que atienden a personas mayores no es algo que esté pagado y
reconocido en España suficientemente, por parte del Estado. Vamos hacia una
sociedad cada vez más envejecida y el reparto de los puestos de trabajo debe
ser más justo y equilibrado. Es otra forma de ir por un buen camino que nos
lleve, de una vez por todas, a la igualdad.
En los países del
primer mundo no parece que la lucha por la igualdad sea algo muy tremendo y
dificultoso. Es verdad que todavía existen mentalidades empresariales que son
reacias a aceptar la igualdad. Y no valen los argumentos economicistas para que
las mujeres cobran menos que los hombres por igual clase y categoría de
trabajo. El pasado no debe ser un límite a los justos deseos de suprimir
totalmente la brecha salarial. Si queremos una sociedad realmente justa y
solidaria se deben dar pasos sólidos en esa dirección, sin dudas y con energía
y fuerza. Lo están demandando los ciudadanos de forma clara y rotunda en calles
y plazas.
miércoles, 7 de marzo de 2018
THOMASIUS
Este
filósofo que vivió a caballo de los siglos XVII y XVIII, escribió, entre otras
obras, Los Fundamentos de derecho natural y de gentes, publicada en 1705. Su
trayectoria intelectual se puede calificar de ilustrada.
Defendió
la libertad de pensamiento que expresó en sus escritos, y en su enseñanza
universitaria en la Alemania de su tiempo. Frente a la intelectualidad germana
subordinada a los límites establecidos por el poder constituido, se mostró
crítico y con libertad de raciocinio, respecto a lo que consideraba actitudes propias del despotismo ilustrado,
etc.
También
fundó la primera revista cultural alemana, lo que da idea de su capacidad para
impulsar el conocimiento, y su difusión general. Fue profesor en Leipzig,
ciudad en la que nació. Pero la intolerancia existente hizo que los poderosos
lo expulsaran de su ciudad natal.
Aunque
siguió el camino iniciado por Pufendorf desarrolló un pensamiento
iusnaturalista propio y original. Thomasius no estaba de acuerdo con ciertos
planteamientos de la Iglesia luterana. También polemizó con algunos jesuitas
por sus tesis acerca del derecho natural. Aunque apreció la obra de Gracián.
Además en su biblioteca particular
figuran obras de Cervantes, Miguel de Molinos, etc. Lo que demuestra su interés
por la cultura, y por la filosofía y teología españolas.
En
Prusia, en la nueva Universidad de Halle, Christian Thomasius desarrolló su
labor docente, y fue un pensador
relevante en el centro de la Ilustración alemana del norte de Alemania. Su
constante actitud crítica promovió las reformas del derecho del Antiguo
Régimen. Lo que pretendía es que, por ejemplo, se prohibiera la confesión
mediante torturas, y los procesos de brujas, etc. Thomasius menciona al huma
nista Juan Luis Vives en relación con la
eliminación de la tortura de las leyes procesales penales.
En
este sentido, los principios del derecho natural se oponen, radicalmente, a
estos excesos que son injustos, y no respetan la dignidad humana, y el derecho
al honor de las personas.
De
las obras de Thomasius se deduce que para este filósofo era necesaria la
existencia de estados éticos, basados en la racionalidad del derecho natural.
Algo parecido a un hegeliano estado ético.
La
vena educadora de este profesor universitario se expresó en la ciencia y los
conocimientos que impartió, y también se manifestó en su intento de formar el
carácter de sus alumnos. Respecto a sus lectores, quería proporcionar
argumentos con una dialéctica brillante, persuasiva y agradable.
Thomasius
tuvo en cuenta la duda cartesiana, ya que sirve para destruir los prejuicios,
pero consideraba que existían principios evidentes en el ámbito del derecho
y de la filosofía. Por tanto, a su
juicio, era innecesario seguir la duda metódica, como punto de inicio, según la
metodología de Descartes.
Su
talante crítico se mostró en desacuerdo con la filosofía de Leibniz y Spinoza.
De todos modos, conocía la filosofía antigua, la Lógica de Port-Royal, el
ramismo, etc. Era un gran erudito, y mostró una actitud ecléctica ante la
diversidad de doctrinas y teorías. Lo que me parece juicioso y coherente.
Parte
de la premisa de que el hombre ha sido creado por la divinidad como animal
racional. El mismo Aristóteles insiste en la racionalidad que los seres humanos
muestran con la capacidad de hablar y pensar. Y la libertad va unida a la capacidad racional desde la
interpretación de las ideas de Thomasius.
Por
tanto, las cuatro normas o deberes fundamentales que están basados en la ley
natural según este filósofo son: primero evitar la soberbia, segundo no dañar a
otros, y resarcir o reparar el daño causado, y tercero promover cuanto sea
posible lo que es útil a los demás. Respecto a la cuarta norma, considero que
no es tan esencial, ya que se refiere al mantenimiento de la palabra dada,
porque está sujeta a distintas condiciones y supuestos en el ámbito moral y
legal.
Pero
la clave de estas normas o principios de derecho natural, a mi juicio, radica
en la utilidad de las mismas para la vida social e individual.
Por
tanto, Thomasius sigue con la tradición iusnaturalista de Grocio y Pufendorf, y
afirma la necesidad de la existencia de un derecho positivo, superando o
sobrepasando el sentido hobbesiano del
estado. Puesto que el derecho natural que afirma tiene en cuenta, muchos más
aspectos relativos a la experiencia humana, desde la perspectiva de un
consciente pesimismo realista.
Aunque
considera realizable el progreso de la sociedad, y lo impulsa, decididamente, con su actividad filosófica.Pienso
que se puede establecer, de modo general, que la ley natural es el fundamento
de la ley positiva. Y que la fuerza
vinculante es coactiva para obligar a su cumplimiento. Thomasius escribe que el
necio solo obedece coactivamente.
lunes, 5 de marzo de 2018
EPISTEMOLOGÍA DE POPPER
Este gran filósofo que murió a los 92
años en 1994 ha dejado un legado filosófico enorme. Su obra La lógica de la
investigación científica marcó un hito en la epistemología o teoría del conocimiento
o de la ciencia y también en la filosofía de la ciencia. Karl Popper siempre se
consideró agnóstico. Aunque nació en Viena
vivió gran parte de su vida en el Reino Unido, ya que llegó a ser
profesor de filosofía en la London School of Economics and Political Science
desde el año 1946.
Se opuso a cualquier tipo de
nacionalismo y también a la creación del Estado de Israel. En la década de los
años veinte del siglo XX Popper era
socialista y poseía ideas de izquierda que utilizaba en sus planteamientos
políticos, con una precisa pedagogía.
Su interés por otras ramas del
conocimiento además de la filosofía queda puesta de manifiesto, si se piensa en
su formación intelectual. Presentó en 1928 una tesis doctoral dirigida por el
psicólogo y lingüista Karl Bühler. También es reseñable que adquirió en 1929 la
capacitación para dar lecciones universitarias de matemáticas y física. Lo que
realmente da una idea de los vastos conocimientos de Popper y su interés
universal por el saber, algo ciertamente muy adecuado para cualquier filósofo.
Pienso, por ejemplo en Gustavo Bueno que también dominaba otras disciplinas
científicas y poseía unos conocimientos inmensos. Aunque en los años treinta
del siglo pasado estuvo en contacto con el Círculo de Viena tambié criticó
algunos de sus postulados y no se debe considerar a Popper como positivista.
En el año 1969 se retiró de la vida académica, pero siguió escribiendo y
publicando hasta su muerte. Fue nombrado caballero por la reina Isabel II del
Reino Unido en 1969. Recibió numerosas distinciones y reconocimientos y premios
por su producción filosófica y por su
enseñanza.
En relación con la epistemología
popperiana cabe decir que se propone la búsqueda del criterio de demarcación
que determine los límites entre a ciencia y la metafísica. De este modo, se
puede distinguir las proposiciones científicas de las que no lo son. Y esto lo
plantea en su libro La lógica de la investigación científica de la década
de los años treinta del siglo XX. Desde
el planteamiento de Popper es evidente que una proposición es científica si
puede ser refutable.
Se puede afirmar que supera la polémica
entre empirismo y racionalismo. Sostiene que las teorías precisan de la
experiencia y de las refutaciones para poder diferenciar qué teorías son aptas.
Según Popper el conocimiento no avanza
confirmando leyes, sino descartando leyes que claramente contradicen la
experiencia. Las observaciones experimentales son lo fundamental en la labor de los científicos y en su actividad crítica respecto a los
conocimientos. Estableció el falsacionismo, pero también es cierto que es
objeto de críticas fundamentadas. Por ejemplo, la tesis de Quine-Duhem u
holismo confirmacional o epistemológico argumenta que no es posible probar que
un enunciado ha sido falsado. Y la comunidad de los científicos tiene que
ponerse de acuerdo o alcanzar un consenso sobre qué teorías aceptar y cuáles
rechazar.
Popper desarrolló lo que se puede
denominar como racionalismo crítico. Por la trascendencia de la racionalidad y
lo esencial del ejercicio crítico de la
razón y la argumentación en el campo del saber y del conocimiento. En su libro
Conjeturas y refutaciones escribe: «Además, si ponemos a prueba nuestra
conjetura y logramos refutarla, vemos muy claramente que había una realidad,
algo con lo cual podía entrar en conflicto. Nuestras refutaciones, por ende,
nos indican los puntos en los que hemos tocado la realidad, por decir así».
Popper considera que el psicoanálisis y
el marxismo no son explicaciones científicas, algo con lo que estoy plenamente
de acuerdo. Fue un teórico defensor del liberalismo político y de la sociedad abierta frente al comunismo
y cualquier tipo de totalitarismo.
viernes, 2 de marzo de 2018
SARTRE Y LA LIBERTAD
La
fenomenología influyó decisivamente en el pensamiento de este filósofo francés
muerto en 1980. Fue el intelectual de
más prestigio de su época en Francia. Fue uno de los pensadores que impulsaron
y apoyaron la Revolución de mayo del 68 en París. Su labor literaria como autor
de novelas y obras de teatro fue extraordinaria. Y si a ello añadimos su genial
producción filosófica se entiende que le fuera concedido el premio Nobel. Su rechazo del mismo en 1964 da una idea precisa de su talante
independiente, y de su libertad de pensamiento, que quiso mantener a toda
costa.
Aunque,
a mi juicio, la aceptación de ese gran premio no hubiera afectado su libertad
para escribir y pensar. De todos modos, es uno de los grandes pensadores de todos
los tiempos.
Jean
Paul Sartre también estuvo de acuerdo con los planteamientos del marxismo, y
cultivó el denominado existencialismo. El primer gran libro de este pensador
galo es El ser y la nada que es un ensayo o tratado que elabora una ontología
fenomenológica preguntando por el ser.
A
diferencia de lo que pensaba Descartes, para Sartre, la relación del yo con el
mundo es lo esencial, ya que la conciencia es intencional, y está abierta a la
realidad. Somos seres que nos hacemos o construimos en cada momento de la
existencia. Frente al yo puro o trascendental propuesto por Husserl, se puede
decir que el filósofo francés prioriza la conexión con lo empírico, con el
mundo material.
El
«ser en sí» es para Sartre es el ser de
lo cósico, o lo que es lo mismo, de lo que no tiene posibilidades, ni
existencia o libertad. En cambio, el «ser para sí» es el hombre o su conciencia
de ser que no es nada en sí mismo, y está inventando y construyendo su existencia
a lo largo del tiempo.
Indudablemente,
lo fundamental en el ser humano es la libertad. No se puede determinar una
esencia o naturaleza que sea lo específico de cada ser individual, ya que el
propio ejercicio de la voluntad va dando forma a lo que es cada persona. Y esta
es una de las grandes cuestiones descubierta por los análisis y reflexiones
metafísicas de Sartre.
En
este sentido, la libertad es la propia esencia humana, puesto que hace posible
el despliegue de su capacidad volitiva. Lo que supone la existencia de riesgos,
ante la perpetua elección de posibilidades
propia de la existencia, por parte de cada sujeto.
Desde
la perspectiva atea de Sartre cada
individuo se hace a sí mismo a través de sus decisiones y actos, y, por tanto,
ejerciendo su libertad. Si bien, en una primera época plantea la necesidad de
una moral de situación que es un
relativismo, sin valores morales estables, en la segunda época cambia de
registro, y afirma planteamientos más
positivos.
La
responsabilidad y la libertad son valores absolutos en sí mismos que se
complementan perfectamente.
De
este modo, las conductas son libres, pero tienen también consecuencias para la
humanidad, lo que delimita la posibilidad real y efectiva de construir
proyectos adecuados a la libertad de los hombres.
Por
tanto, el ser humano ya no es una pasión inútil, porque su sentido profundo
está, precisamente, en el desarrollo de su libertad de forma apasionada.
El
tema de la angustia ocupó el pensamiento de Sartre, ya que al escoger lo que
queremos ser, siempre podemos devenir distintos de lo que somos. Aunque, desde
otro enfoque, se puede ser consciente de que estamos cambiando permanentemente,
ya que somos seres dinámicos, y la misma estructura de la realidad también es
cambio y movimiento. Además, a mi juicio, las decisiones libres que se toman no
eliminan el pasado, y, por tanto, siempre existe en nosotros una parte de lo
que fuimos.
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