Física aristotélica
No cabe duda de que la
física de Aristóteles es una investigación sobre el movimiento en todas sus
dimensiones. El propósito de la ciencia física es la explicación de la realidad
concreta. En cambio, para el Estagirita la Matemática es sobre todo una abstracción
de tipo mental.
El uso de las
matemáticas es apropiado en ciertas cuestiones que son distinguibles con
precisión en el estudio de la naturaleza y la realidad. El análisis y estudio
del funcionamiento del mundo sublunar está condicionado o determinado por el
concepto de cambio o movimiento. Para Aristóteles la razón de todo movimiento está en la finalidad o
propósito que persigue. Es lo que se denomina finalismo o teleologismo. También se puede decir que es un organicismo.
Las explicaciones de
la Física de Aristóteles describen y analizan muchos fenómenos naturales y eran
mejores que las de otros investigadores de su tiempo. De todos modos, es
evidente que no pudo aclarar ciertas cuestiones en el ámbito de la cosmología
de una manera empírica y especuló. En su época no se habían inventado aparatos
de medición y tampoco telescopios o microscopios, por lo que la observación
estaba limitada a lo que se podía discernir en la percepción de la realidad
existente.
Escribe Aristóteles
que «En efecto, en el tiempo se dan generación,
destrucción y crecimiento, cambio de cualidad y traslación, en la medida en que
hay cambio, en esa medida hay un número de ese tipo de cambio». Considera que el universo físico está formado por los
cuatro elementos y es perfecto, único, finito y eterno. Está convencido de que
la perfección del mundo es demostrable con argumentaciones apriorísticas o
previas a la experiencia.
La finitud del
Universo o del mundo se deriva, según Aristóteles, de su condición de perfecto,
ya que no es incompleto o infinito. Este gran filósofo sostiene que ninguna
cosa real puede ser infinita. A su juicio, la esfera de las estrellas fijas
establece o determina los límites del espacio. Por tanto, no puede haber más
mundos y tampoco puede existir el vacío. Incluso llega a decir que el
movimiento en el vacío no podría existir. Define el tiempo como el número del
movimiento según el antes y el después.
La actividad
científica de Aristóteles se dirigió especialmente hacia las investigaciones
sobre el mundo animal. La física es para él una ciencia teórica y también lo es
la matemática y la filosofía primera o metafísica. El movimiento es el
paso de la potencia al acto. El
Estagirita se ocupó de todo tipo de investigaciones empíricas. Pensaba que no
puede haber más mundos que el nuestro, ya que afirma que toda la materia está
en el universo en el que estamos.
El estudio del mundo
natural para Platón no supera el campo o el ámbito de
los razonamientos probables y pertenece al mundo de la opinión y, por tanto, no
es un conocimiento verdadero de un modo
absoluto. En cambio, para Aristóteles la investigación sobre el mundo natural
es, indudablemente, una ciencia en el sentido más riguroso del término.
Todo lo que forma
parte de la naturaleza merece ser investigado de la manera más extensa y
profunda. Dice Aristóteles que «en el estudio de la naturaleza, lo que interesa es la
sustancia total de un ser determinado y
no sus partes que, separadas de la sustancia
que constituyen, ni siquiera existen».
El universo está
constituido por dos mundos desde su interpretación de la realidad existente.
Son el mundo sublunar y el supralunar. Sostenía que la tierra, de forma
esférica, está en reposo en el centro del universo. Es lo que se denomina
concepción geocéntrica o geocentrismo y no es cierto. El heliocentrismo de
Copérnico está más cerca de la verdad real.
A su juicio, aunque no
contemplaba la posibilidad de la evolución de las especies, consideraba que en
la escala de los seres la inferior era la materia inorgánica y en la parte superior está la materia
organizada. Pensaba que las plantas eran menos perfectas que los animales,
aunque era amigo de Teofrasto que era filósofo y botánico y que le sucedió al
frente del Liceo.
De hecho, este último
dirigió esta especie de universidad científica en Atenas durante 36 años hasta
su fallecimiento a los 85 años en el año
287 a.C. La escuela peripatética que fundó Aristóteles fue fundamental a lo
largo de cientos de años y su huella también perduró en el Museo y en la Biblioteca de Alejandría y
posteriormente en la época romana hasta llegar a la actualidad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario